Reseña: El Juego de la noche

Titulo: El Juego de la noche 

Autor: Sherrilyn Kenyon

Género: Fantástica
Saga: Cazadores Oscuros
Anterior: El beso de la noche

Editorial: Random House Mondadori/DeBolsillo

Valor: 29.000

Vane Kattalakis, hombre lobo, se ha convertido en un desterrado. Su propio clan lo han condenado a muerte por haberse puesto de lado de los Cazadores Oscuros y vive oculto en Nueva Orleáns. Lo único que logra desvanecer sus malos presagios es la presencia de la atractiva Bride, a quien solo ha visto una vez pero por quien se siente atraído de forma inmediata. Bride, en cambio, ha decidido que no quiere saber nada más de los hombres. Pero cuando se encuentre con Vane, no podrá resistirse a su instinto animal de lobo...

“¿Qué mortal de nuestro días no sabe que debe temer cualquier ruido extraño que escuche una noche de luna llena? ¿Qué debe temer los aullidos del lobo?”

¡Madre del amor hermoso! ¿Existe alguien más guapo que Vane?

“Cuenta la leyenda que los cazadores Katagarios y Arcadios fueron fruto de las mejores intenciones, al igual que sucede con las peores maldiciones.”

La leyenda de los Katagarios y Arcadios siempre me han fascinados, el mundo que creó Sherrilyn Kenyon es tan gran, tan extenso, que sabes que en cada libro vas a encontrar mil cosas nuevas, y que no todo lo que había en los libros anteriores es lo que parece. Desde los inicios del libro te atrapa y te cautiva. La triste historia y el sufrimiento del protagonista, el miedo que siente a mostrarle ese lado sobrenatural a la única mujer que le ha interesado y que lo trata como a un hombre, la ternura y su afán de protegerla te hacen enamorarte de él. Encontré pocas cosas que me disgustaron, cada vez en cada situación me emocionaba más y más. Las citas, los viajes en el tiempo, sus momentos de héroe cuando venía a salvar a la chica en problemas. Nada mejor que un perfecto hombre que te trate con ternura y que te desee para levantar el ánimo a una chica.

Este es uno de mis libros favoritos, de toda la gran colección de los cazadores oscuros. Los personajes tienen personalidades cimentadas y ya desarrolladas en los anteriores libros. Me gustó mucho el componente realista que impregna a la personalidad de la protagonista, la búsqueda como tal de la tranquilidad y el amor que hace el protagonista de igual manera. La cantidad de situaciones bizarras te mantenía al vilo y al borde de la risa, pasan por un millar de situaciones, desde secuestros, viajes en el tiempo, ex novios egocéntricos, salidas a cenar, ataques Daimon.

 “—No sé si sabes que los humanos tienen una increíble capacidad para amar. No deberías subestimarla, ni tampoco subestimarte, solo porque te asuste lo que pueda pasar.”

Hubo un momento cuando Bride descubrió su marca de emparejamiento y vio que Vane también la tenía, que me sentí enojada con ella, ¿Por qué estaba tan dispuesta a creer lo peor de Vane, cuando él solo  había mostrado hacía ella amor y devoción? Me molestó tanto porque se dejó llevar por su falta de autoestima y su poco amor propio, creyendo que un hombre como Vane, no podía fijarse en ella, más allá que para asesinarla (Bizarro, ¿no?) ni siquiera le permitió explicarse. La reacción de la protagonista a este nuevo mundo mágico y sobrenatural al cual pertenecía Vane, fue bastante realista, nada de tomar las cosas con tranquilidad y serenidad. Mi reacción en ese caso hubiera sido mucho peor, gritos por todos lados, alaridos y desmayos por doquier.

Algunos extractos criticaban el papel de los humanos en el mundo. La humanidad muchas veces se deja llevar por la ambición y la codicia. El desprecio hacía los “animales” las ganas de poder, el ansia de ser superior, la doble moralidad y la hipocresía de los “humanos” que creen ser superiores cuando en realidad han cometido los crímenes más atroces de la naturaleza.

“No había nada humano en la humanidad. En el fondo, todos eran animales regidos por el instinto de supervivencia.”

Sherrilyn Kenyon, en su saga cazadores oscuros arma su arsenal. Te lleva desde la risa, al misterio, de hermosas escenas de amor a escenas candentes. El juego de la noche tiene todos los ingredientes: misterio, fantasía, amor, lujuria, conversión y hombres que están como un tren.

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